
Durante el mes de febrero la ciudad de Castro cumplió 455 años desde su fundación; siendo la tercera urbe más antigua de Chile con existencia continúa. Un nuevo aniversario que nos llena de alegría, orgullo y ganas de seguir trabajando por el futuro de la comuna, pero, que lamentablemente contrasta con el sostenido deterioro en la calidad de vida de las castreñas y castreños producto de la falta de compromiso de los gobiernos para realizar las inversiones que necesita una urbe como Castro que día a día crece pero que carece de mayor inversión pública.
Castro, como capital provincial, hoy es una ciudad que muestra un mayor desarrollo producto de la inversión privada, pero necesita de una mayor inversión que provenga del Estado, el cual tiene una gran deuda pendiente con este territorio.
La congestión vehicular está haciendo de Castro una ciudad invivible, donde por el solo hecho de ingresar a la ciudad requiere de una hora treinta minutos, cuando lo normal es un tramo que se podría cubrir en veinte minutos. Que decir de las largas e interminables colas que se producen en verano producto de los miles de visitantes que llegan a la comuna.
Desde hace casi 7 años, hay un proyecto para construir un bypass de 16 kilómetros que permitirá ordenar y separar los flujos en una ciudad donde hasta el día de hoy la ruta 5 pasa por el centro histórico de ella. Lamentablemente una obra que debería haberse inaugurado originalmente el 2018 y que hoy al 2022 alcanza un 50% de avance, tiene sumido a los habitantes de Castro en una pesadilla permanente con el temor que por distintos problemas pueda ser abandonada en su ejecución.
Necesitamos que los actores competentes actúen en forma decidida y coordinada, con la mirada puesta en el bien común, más allá de menudencias administrativas que muchas veces conducen a la inacción.
Hemos esperado 9 años y el paso de 3 gobiernos para concretar una obra tan relevante para Castro y todo Chiloé, lo que evidencia que el Estado chileno no ha sido capaz de terminar con su exceso de centralismo y la desidia que lo aqueja.
Atentamente,
JUAN EDUARDO VERA SANHUEZA,
ALCALDE DE LA COMUNA DE CASTRO