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Valoran avance de reforma previsional tras acuerdo en el Senado

El gobierno presentó indicaciones consensuadas que incluyen una cotización adicional del 8,5% a cargo del empleador, mejoras en las pensiones de 2,8 millones de adultos mayores y una reorganización de la industria de AFP para mayor transparencia y competitividad.

Ayer finalmente el gobierno ingresó las indicaciones consensuadas a la reforma previsional que se discutía en la Comisión de Trabajo del Senado, marcando un avance significativo en esta materia. Uno de los puntos clave es la cotización adicional del 8,5% a cargo del empleador, que se distribuirá en un 4,5% para cuentas individuales y un 4% para el Seguro Social, administrado por el Fondo Autónomo de Protección Previsional. Este último porcentaje incluye un 1,5% como préstamo reembolsable destinado a mejorar las pensiones actuales mediante la garantía por años cotizados, y un 2,5% enfocado en el bono tabla para mujeres y el Seguro de Invalidez y Sobrevivencia (SIS).

El SIS, cuya tasa actual es de 1,38%, será parte de la cotización adicional y se implementará gradualmente en un plazo de ocho años para mitigar su impacto en pymes y el empleo. Además, se creará un nuevo organismo autónomo encargado de gestionar el Seguro Social, con soporte administrativo del Instituto de Previsión Social (IPS).

La reforma fue aprobada unánimemente por los senadores de la Comisión de Trabajo, en un acuerdo transversal entre el Ejecutivo y Chile Vamos. Según el ministro de Hacienda, Mario Marcel, la reforma beneficiará a 2,8 millones de adultos mayores, incrementando sus pensiones entre un 14% y un 35%, gracias a medidas como el aumento de la Pensión Garantizada Universal (PGU), la garantía de 0,1 UF por años cotizados para afiliados regulares y la compensación para mujeres debido a su mayor expectativa de vida.

El sistema propuesto establece un modelo mixto tripartito, con aportes de trabajadores, empleadores y el Fisco. El financiamiento se distribuirá en tres tercios, equivalente al 2,9% del PIB para los trabajadores, 2,4% para empleadores y 2,5% para el Fisco. Según Marcel, este esquema asegura la sostenibilidad del sistema en el largo plazo, complementando los aportes fiscales con los beneficios derivados del aumento de cotizaciones y el retorno de inversiones.

La reforma también plantea una reorganización de la industria de AFP. Los nuevos actores podrán gestionar inversiones subcontratando el manejo de cuentas, que será centralizado en un sistema de cobranza previsional licitado. Además, se promoverá la transparencia, separando los costos administrativos de los excedentes generados por la industria.

Habrá licitaciones periódicas de afiliados para incentivar menores comisiones. Cada dos años se subastará el 10% de los afiliados seleccionados al azar, y la gestión se adjudicará a quien ofrezca la menor comisión, manteniendo ese precio por cinco años. Este mecanismo, junto con premios y castigos por desempeño, busca alinear los intereses de los inversores con la rentabilidad de los afiliados.

REACCIONES

En este contexto, el diputado por la zona, Jaime Sáez, valoró que, luego de tanto tiempo y de una larga discusión, se alcanzara un acuerdo en el Senado para viabilizar la tramitación de la reforma de pensiones.

“La próxima semana esperamos su tramitación en la Comisión de Hacienda y que pueda ser votada en la sala del Senado. Al mismo tiempo, hay algunos aspectos de ese acuerdo que no representan el sentir y la mirada de los parlamentarios en la Cámara, y son aspectos importantes que debemos discutir junto al gobierno en los días venideros, esperando alcanzar una posición lo más robusta posible que nos permita sacar adelante una reforma de pensiones que dé conformidad y tranquilidad a la mayor parte de la ciudadanía, que debe verse impactada, esperemos, positivamente por los cambios que se están trabajando”, dijo.

En tanto el diputado Mauro González señaló que «Es alentador ver que estamos llegando a acuerdos para mejorar las pensiones en el país y equipararlas entre hombres y mujeres. Hemos logrado mantener la propiedad de los fondos de pensiones en manos de los trabajadores, lo que es fundamental para garantizar su seguridad financiera. La progresividad en el aumento de las cotizaciones con cargo al empleador es a lo largo de un período de 9 años, para ayudar a aliviar la carga inmediata y permitir que las empresas se preparen gradualmente para este cambio. En general, es positivo ver un enfoque equilibrado y gradual en esta reforma de pensiones”.

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