Elena Vicencio cierra un año de crecimiento y éxitos en la natación juvenil

Elena Vicencio, joven nadadora oriunda de Chonchi, cierra un año marcado por importantes logros deportivos y un proceso de adaptación que ha puesto a prueba su dedicación y compromiso. A sus 14 años, la deportista ha ampliado su experiencia en competencias nacionales e internacionales, consolidando su posición entre las figuras emergentes de la natación chilena.

El 2024 comenzó con éxito en el Campeonato Nacional, donde obtuvo los títulos en los 100 metros mariposa y 200 metros libres, además de varios segundos y terceros lugares en otras pruebas individuales y por equipo. Estos resultados reflejan su capacidad competitiva y versatilidad en el agua.

Sin embargo, la temporada no estuvo exenta de dificultades. Las condiciones de la piscina en Castro forzaron a Elena a trasladarse a Santiago, donde vive actualmente junto a su hermano mayor, Diego. Este cambio supuso un ajuste significativo tanto en lo personal como en lo deportivo, pero también le permitió acceder a mejores instalaciones y oportunidades de entrenamiento.

DESEMPEÑO

En mayo, su participación en el Open le valió una marca que posteriormente le permitió ser nominada nuevamente a la selección chilena. Más tarde, en julio, brilló en el Nacional, obteniendo un primer lugar en los 200 metros libres, segundos puestos en los 50 y 100 metros mariposa y 100 metros libres, y un tercer lugar en los 50 metros libres.

Noviembre fue un mes crucial en su calendario. Representando a Chile en la Copa Pacífico, realizada en Santa Cruz de la Sierra, compitió en seis pruebas individuales, destacándose con un octavo lugar sudamericano en los 1500 metros libres, una distancia en la que debutaba. De regreso en el país, participó en los Juegos Binacionales de la Araucanía, representando a la región de Los Lagos.

Elena también amplió significativamente su repertorio competitivo este año. En 2023 nadaba cinco pruebas individuales, mientras que en 2024 participó en nueve, incluyendo distancias largas como los 800 y 1500 metros libres, y los 200 metros mariposa. Este avance evidencia su evolución técnica y su capacidad para asumir nuevos retos.

“Ha sido un año muy bueno, muy intenso, parecido al año 2023, ha sido un año de mucho cambio, de ciudad, de club, cambios en las pruebas en las que está compitiendo, ha pasado de velocidad a pruebas más de medio fondo y fondo, de hecho una de las pruebas que nadó prácticamente por primera vez fue el 1.500 en el sudamericano, en esa oportunidad quedó octava. Ha sido un año bueno, de mucho crecimiento”, indicó su padre, Pablo Vicencio. 

NUEVO AÑO

El año concluyó con su debut en el Club Polaris de Puerto Varas, con el cual compitió en el Open Nacional. Allí alcanzó el tercer lugar en los 1500 metros libres y en el relevo femenino 4×100 metros libres, además de destacadas posiciones en pruebas individuales y por equipo.

“De alguna manera se ha ido consolidando. Cumplió su objetivo para este año, que era mantenerse en la selección chilena, clasificar a los juegos binacionales, que también lo hizo, y por supuesto, mantenerse dentro de las mejores de Chile. Este ha sido un año super bueno, cierra un ciclo en su actual categoría, el próximo entra a una categoría, se vuelve más difícil, pero Elena sigue trabajando”, expresó.

Respecto a los cambios señaló que los ha sobrellevado de buena manera en los personal y deportivo. “Ella afortunadamente en Santiago la recibió la selección chilena, una vez que se fue trabajó en la piscina Kristel Köbrich y eso fue una motivación muy grande. La verdad que ha sido un sacrificio de todos, en lo emocional dejarla partir a los 14 años. se un sacrificio también en términos económicos, pero un poco es la realidad de todos los deportistas chilenos. Cada vez las cosas se ponen más difíciles, pero Elena ha demostrado su perseverancia y constancia de que se puede”, cerró.

Con miras al 2025, Elena enfrenta el desafío de competir en la categoría Juvenil B, donde se medirá con nadadoras de hasta 17 años. Aunque será una de las competidoras más jóvenes, llega con un ranking que le permitirá mantenerse dentro de las mejores en varias pruebas.

«Vamos paso a paso, hay que seguir trabajando. Es un camino largo, de mucho esfuerzo, sacrificios, de crecimiento y también de muchas satisfacciones«, reflexiona Elena sobre su experiencia este año.

Desde la familia, finalmente indicaron que el apoyo de su entorno ha sido fundamental para sostener su progreso. Desde los profesores del Liceo Galvarino Riveros hasta los técnicos y familias amigas de Puerto Montt, Puerto Varas y Santiago, todos han contribuido a que pueda seguir adelante en este exigente deporte.