Miradas opuestas respecto al desarrollo de la actividad turística del reciente verano dejó el reciente encuentro por parte de la mesa público-privada de Ancud.
La instancia que congrega a la Municipalidad, Servicio Nacional de Turismo y gremios del turismo y comercio permitió a las partes analizar los puntos altos y bajos dejados durante el período estival.
El presidente de la Cámara de Comercio Detallista y Turismo, Gastón Cárcamo, resumió que la sesión permitió instalar en la mesa de trabajo las distintas miradas de los sectores involucrados.
“Tenemos cifras encontradas con lo que tiene el Departamento de Turismo de la Municipalidad porque nosotros tenemos exactamente la copia del año 23, o sea el año 23 con el año 24 fue muy similar incluso con algunas bajas”, dijo Cárcamo.
El dirigente señaló que en enero de este año la capacidad de ocupación fluctuó entre el 30 y 40% mientras que febrero “subió bastante, pero nunca superó lo de la temporada 2023”.
Uno de los factores que influyeron en esta tendencia a la baja tuvo que ver con la realidad económica del país redundando en ajustes presupuestarios antes de decidir los destinos por visitar.
La principal novedad tras el balance se relaciona con la materialización de un proyecto de “turismo inteligente” consistente en la instalación de antenas o puntos que mediante señales directas a los dispositivos móviles invitarán al visitante a quedarse y conocer las distintas alternativas turísticas de tiene esta comuna chilota. Una inversión municipal que alcanza a los 48 millones de pesos.
