
En constante temor vive una vecina y sus hijos en el sector de Mocopulli Bajo, en la comuna de Dalcahue, por lo que advierte es un constante acoso por parte de la persona que le vendió los terrenos donde actualmente tiene su vivienda.
La situación también podría configurar una suerte una estafa, ya que la misma persona estaría poniendo a la venta nuevamente los terrenos que hoy están en proceso de regularización.
AMENAZAS
La situación la dio a conocer Lidia Burgos, quien indicó que todo se inició con la compra de 10 hectáreas de terreno por parte de su pareja. La venta se concretó y se le canceló por la superficie, celebrando un contrato de compraventa, sin que en su momento se realice el saneamiento, proceso que actualmente están realizando sus hijos tras el fallecimiento de su padre.
Agregó que tras ello comenzó el conflicto. “Esta señora, apenas murió mi esposo comenzó a vender sitios en las hectáreas que le habíamos comprado y pagado. Estos pagos se hicieron, tenemos declaración jurada de todos los dineros que ella recibió. Entonces, ahora viene y me dice que va a echar abajo lo que tenemos porque, ya me echó una casa, quedó el puro radier y ella vendió ese sitio, se aprovechó que no estábamos por motivos de salud”, expresó.
Burgos señaló que una primera vivienda que mantenían fue desmantelada y posteriormente el sitio donde se encontraba fue vendido a un tercero. Misma situación que estaría realizando sobre otros terrenos que adquirió su pareja.
“Ella niega todo lo que le pagamos, que ella no hizo negocios conmigo ni con mis hijos y que me va a echar de acá. Dijo que iba a venir con una retroexcavadora, que la tiene acá al lado, para echar la casa abajo. Es una casa prefabricada que no la hemos podido terminar. Ella ya vendió, y nos quedan como 6 hectáreas”
expresó.
En esta línea señaló que se habría concretado algunas ventas sobre esos terrenos, pero ante el constante acoso y amedrentamiento está bajo constante temor a que ocurra una situación mayor.
“Ella ha vendido sitios y la gente se da cuenta que nosotros compramos antes, se retiran y ella los vuelve a vender. Hay otra vecina, que le desconoce lo que le pagó y ella lo ha tocado hasta golpes. Hoy me amenazó que me iba a destruir la casa y dejé una constancia en Carabineros”, expresó.
DONDE IR
La vecina señaló que hay constancia en Carabineros sobre estos episodios violentos y amenazas, ya incluso derivaron en un recurso de protección, y apunta a que ahora no saben dónde recurrir.
“Yo no sé dónde ir para que esta mujer deje de molestar, nosotros ya le pagamos, pero ella insiste en que esto no es nuestro, y que es la dueña, tenemos los recibos firmados en la notaría por ella misma, entonces, necesito algo que nos proteja porque no puedo seguir así. Mis hijos también, nerviosos, porque anda siempre a la defensiva, que no sabemos qué va a pasar, que nos va a quemar la casa, si ya fue capaz de desmantelar una. Mis hijos trabajan por Aysén y vienen cada 15 días, no podemos vivir una vida normal”.