Bingos y campañas solidarias: la realidad que viven muchas familias para costear operaciones y medicamentos en Chiloé

Tener una persona enferma genera un tremendo impacto en el entorno de la familia y conocidos y desde Chiloé, se hace más difícil y costoso.  Historias hay muchas, como el caso de la pequeña Cecilia Cárdenas de 11 años con un diagnóstico de hidrocefalia, entre otras condiciones, la que próximamente será intervenida para extraerle un riñón, porque su situación se complicó. Hernán Cárdenas, padre de la menor ancuditana, señaló que, “Ella tiene una infección a los riñones y uno de ellos dejó de funcionar, el 10 de marzo la van a operar en el Hospital de Puerto Montt. Ahora estamos generando una campaña, porque voy a dejarle ropa, tema de pasajes, alimentación, pañales, movilización para poder ayudarla a ella y mi hija La junta de vecinos de la Villa Península de Lacuy y la señora Adriana nos está ayudando. Se me ha hecho super difícil, también hago pequeños trabajos para que pueda salir adelante”, explicó el progenitor, quien da cuenta de su situación donde sus vecinos han organizado una campaña para reunir fondos que le ayuden a solventar los gastos.

FRAGILIDAD SOCIAL

Adriana Gallardo, dirigenta de la salud en Ancud, quien sigue este caso y conoce de otros, comenta la fragilidad social en el que la comunidad se desenvuelve diariamente, “Yo me he dado cuenta que últimamente muchos niños, están pasando por temas de salud, que son graves. Hace algunos días atrás hubo un beneficio para costearle un examen en Estados Unidos a una pequeña en el sector de Caracoles. El tema de la salud en Chile no es que sea todo pagado, hay cosas que hacer, exámenes particulares que no hace el Servicio de Salud y los papás tienen que costearlo, porque hasta que no haya un diagnóstico final, ahí recién es gratis. Tenemos un déficit social en Ancud muy grande, no existe ayuda suficiente de la municipalidad, para que entreguen 100 mil pesos, tiene que entregar un montón de documentos y todo ese protocolo que a veces se puede evitar, no se está haciendo, Tenemos una mala gestión en lo social en Ancud” señala la dirigenta, quien además agrega que la situación de los adultos mayores no es mejor.

APORTES

Tradicionalmente la comunidad que necesita recursos para enfrentar temas de salud o social, recurre a entidades y organizaciones que se preocupan de la acción social, uno de ellos es el Club de Leones. María Teresa Cataldo, integrante de esta entidad ancuditana, da cuenta del alto nivel de casos sociales que solicitan diariamente el apoyo de diversas instituciones para poder enfrentar enfermedades, “Principalmente no hemos dejado- aunque hay menos gente, porque es verano- de entregar ayudas. Siempre hemos estado pidiendo en las empresas, hace un tiempo nos regalaron cajas de pollo y las fuimos a dejar a dos instituciones como Fazenda y la parroquia de la iglesia San Pío. Casi todas las semanas nos llama gente que necesita que uno lo ayude en forma personal, pero los tomo para que sean para el club, porque son temas más grandes. Hoy día, estoy tratando de buscar ayuda para un joven de Queilen que está postrado y necesita de una cama clínica y comenzaremos con esa campaña la próxima semana. Fuimos a Bonilla, en los primeros días de febrero, se entregaron canastas a cuatro familias, hicimos también una recolección en Calle 18 y parte del centro, para solicitar útiles de aseo, que la empresa Varmontt nos trasladó gentilmente, hacia Ñielol que tuvo problemas con los  incendios, pero aquí en Ancud, todos los días llaman, porque necesitan una donación, que van a hacer una rifa y es mucha la cantidad de personas que está solicitando ayuda, para hacer curantos, sorteos, para un niño que está enfermo, para una caballero, en fin”, precisa Cataldo.