Apoderados piden soluciones para no repetir la espera en proceso de Admisión Escolar
Desde las 5 de la mañana de lunes apoderados esperaron a las afueras del recinto la posibilidad de un cupo en el Liceo Politécnico. Introducir nuevas variables de selección y mejorar la calidad de la educación de los demás establecimientos serían parte de los elementos a analizar.

Apoderados pidieron buscar estrategias para no repetir las esperas por un cupo para ingresar a los establecimientos educacionales registradas esta semana. Una situación que se vio en gran parte del país en el marco del proceso de admisión escolar para el período 2023 y que en Chiloé se registró en algunos establecimientos como el Liceo Politécnico de Castro.
Desde las 5 am de este lunes una larga fila de apoderados se podría observar a las afueras del establecimiento por papás que esperan una posibilidad para sus hijos en el establecimiento.
ESPERA
Mónica Guenumán, presidenta del Centro de Padres y Apoderados del establecimiento, señaló que durante el día y madrugada del uno de enero realizaron gestiones para hacer más cómoda la espera de los papás. Para ellos habilitaron toldos para que quienes estaban esperando puedan dormir, además de entregar café y algunos alimentos.
“Estaban del día 1 a las 5 de la mañana, imagínese cuantas horas paradas a la intemperie, sin recibir ninguna ayuda de ninguna autoridad. La única solución era juntarse con otra familia e ir al baño del hospital.”
La dirigente señaló que en conversación con la dirección del establecimiento se lamentó la situación, que no se esperaba la situación y que se generaran las acciones para evitar que los papás deban pasar nuevamente por la espera en estas condiciones.
“Hay que buscar una estrategia para que esa gente no pase tantas horas afuera. Hoy día le digo a la autoridad que ojalá el próximo año no pase lo de anoche, ojalá que cambie el próximo año (…) Conversé con la directora y me señaló que el próximo año se trabajará en equipo, estaba muy preocupada por lo que estaba pasando y no pudo hacer nada ya que no se lo esperaban”.
apuntó.
FACTOR CALIDAD
Paulina Lobos, directora de postgrado de la USS sede Patagonia, miembro del Comité Directivo del SLEP Llanquihue y ex seremi de Educación, recordó que el actual sistema de matrícula nace desde la Ley de Inclusión en 2015, que tiene como objetivo terminar con la discriminación arbitraria, una gratuidad progresiva y promueva la educación integral y dignidad del ser humano.
“El Sistema de Admisión Escolar es una plataforma en la que pueden postular los padres y apoderados a sus establecimientos educacionales de preferencia, esto pretendía y pretende terminar con la discriminación; y que, por ejemplo, se prohíban las pruebas de admisión o se soliciten antecedentes vinculados al desempaño académico, condición socioeconómica y cobro por postulación. El tema es que el espíritu de la ley es uno y en la práctica resultó ser diferente”, expresó.
En esta línea señaló que el factor predominante en la situación que viven los apoderados en el proceso de listas de espera es por la calidad de la educación que logran algunos establecimientos. “Si todos los establecimientos de la provincia, de la región, tuvieran una calidad mínima que garantice el bienestar de nuestros hijos, probablemente no nos importaría en cuál de ellos quedó nuestro hijo seleccionado, porque tenemos un piso mínimo del cual podemos sentirnos tranquilos. El tema es que nuestros hijos no están quedando en establecimientos de nuestra preferencia y las alternativas que quedan no nos convencen porque no todos tienen la misma calidad educativa”, expresó.
En este contexto, señaló que en los últimos años se han realizado grandes esfuerzos en avanzar en mejorar la calidad de la educación.
En esta línea, Paulina Lobos, señaló que las leyes son perfectibles. En el caso del sistema de admisión, a su juicio se debería incorporar nuevas variables de focalización para los estudiantes.
“Tenemos que ir humanizando los procesos, en ese sentido entender que hay situaciones familiares que son importantes tener en consideración. No solo los hermanos sanguíneos. También aumentar los criterios de prioridad, no tenemos uno que tenga que ver con la ubicación geográfica de una familia, ese tipo de mejoras se pueden introducir al sistema. Ahora, también es importante decir que los establecimientos pueden hacer de alguna manera más llevadero este proceso de normalización o regularización que partió hoy (…) Que cuesta habilitar un gimnasio, los pasillos de los establecimientos, poner a disposición las sillas. Tiene que ver con una organización más interna”, expresó.
Respecto al funcionamiento de los Servicios Locales de Educación, indicó que se trata de un proceso que lleva tiempo en su instalación para lograr un óptimo funcionamiento, como la normalización de lo que recibe desde los municipios, homologación de procesos, profesionalización e instalación de dinámicas de trabajo, entre otras materias.
“Es un proceso que lleva tiempo, pero he visto como el SLEP de Llanquihue ha ido evolucionando positivamente, teniendo cada día un foco centrado en el quehacer técnico pedagógico y el bienestar socioemocional de los niños, niñas y jóvenes. Eso es relevante porque no dependerá de la voluntad de un alcalde solucionar el problema de una escuela. Hoy son indicadores técnicos”.
expresó.