La última vez que lo vieron fue en la costanera de la ciudad, cuando se separó del grupo de amigos con que viajaba. Familiares ya ingresaron la denuncia por presunta desgracia sin que hasta el momento tengan datos concretos.
En un enigma se ha convertido el paradero de Rodrigo Alejandro Ramos Cordero (36), joven oriundo de Santiago y que fue visto por última vez en la ciudad de Castro. El capitalino se encontraba junto a un grupo de conocidos en Chiloé, de los que se separó y no se ha vuelto a saber de él.
Cercanos iniciaron una campaña por redes sociales para lograr algún tipo de información, además de realizar las denuncias pertinentes en las policías para activar su búsqueda.
Familiar viajó recientemente a la isla con el objetivo de seguir con las acciones para dar con alguna pista que pueda dar luces de su paradero.
DESAPARECIDO
José Luis Ramos, hermano del desaparecido, llegó este martes a Castro. Señaló que desde la semana pasada no hay información de su paradero, luego de ser visto por última vez por su grupo de amigos en el sector costanera de la capital insular.
“La última vez que lo vieron fue en el puerto de Castro, comiendo ceviches. De ahí, él se alejó de sus amigos, salió a comprar algo y no volvió más, es lo que me dice su amigo. Ellos quedaron con sus pertenencias, mochila y documentos. Tenían presupuestado estar el fin de semana no más en Castro. El día lunes, ellos (amigos) tuvieron que partir para sus casas y él aún no llegaba”, expresó.
Agregó que según la información que manejan, el joven hace unas semanas estuvo recorriendo Puerto Montt y Coyhaique, y al inicio de la cuarentena en la capital regional decidieron dirigirse a la isla.
Si bien han recibido algunas informaciones de que podría haber viajado a Quellón, donde habría sido visto, ninguno de esos datos ha sido corroborado, por lo que siguen en la incertidumbre.
Según explicó, Ramos, la familia había mantenido contacto periódico con su hermano hasta el mes de septiembre, cuando perdió su teléfono celular. A pesar de ello, seguía comunicándose cada dos días, lo que finalmente se interrumpió por más de una semana, lo que generó la preocupación de sus familiares. “Él vive en Placilla, el interior de San Bernardo, con mi mamá y un día salió a recorrer el país.Tengo dos amigos acá que han hecho viral por las redes el caso y no han mantenido informado”, concluyó.
DENUNCIA
En este contexto, señaló que ya se realizaron las denuncias respectivas en Carabineros y PDI, a la espera para que se active una búsqueda que permita dar con su paradero.
“A pasado mucho tiempo. Hasta el momento no tenemos nada concreto. Dijeron que los vieron en Quellón, pero no lo han corroborado. Ellos, se estaban quedando en unas carpas, antes que se perdiera, detrás del cementerio. Creo que allí estaban acampando”, expresó.
Rodrigo fue visto por última vez vistiendo zapatillas amarillas, jeans negro, polerón con gorro y casaca negra.
